Poesía

Una tras otra   sin nombre  las hojas se desprenden.  Asechándome a la izquierda  mientras leo  el gato del vecino. Hoy guardé las cebollas anoche algo me dijo mi sueño.   Suave lijar de hojas  presiento que me ha cagado un pájaro. …

Los hijos del naranjo Soy el naranjo que durmió en el invierno,  soy los frutos arrebatados,  las distancias que los mantienen lejos de su madre.  La ausencia      no definida.  La suerte de otro verano irradiará llenándome de nuevos…

Tú, Concepción Esto(y),          como (me) dejaste todo lo que ahora soy: un cóncavo almacén                                inútil para tu juicio (y) abandono las creencias, las carencias que me conforman. Y no funciona: de todas formas soy                               un racimo  imberbe de flores que…

* … de nuevo borbotea el estanque, un niño zapatea al trote del alazán. * Entre sus brazos sudados la anciana lleva botones de hortensias. * Noche de luciérnagas. Dos viajeros hablan de bonanzas y tristezas. * Ahora que olvido…

Cine, poemas y teología sensual Si Dios fuera el Cine nosotros seríamos los observadores obscenos de sus ocultos designios de sus ocultos deseos, angustias y depravaciones, de sus soledades muy lindas cada noche con sus mañanas a blanco y negro…

Amorfa Cuando los perros (se) pasean con el aire corriendo a las nubes de su casa, Los niños se van a su hogar: Yo, sentada aquí en la banca. Vacía, amorfa, tranquila: Las cosas pasan cuando nada pasa. Me estaciono…

Iniciado Para Sergio Witz I ¿Poesía? Tu mirada encontró el mar, Yacía, ¿Infinito? ¿Dormido? II Ya estaban muertas las olas  y lo que de ellas decían. La hora se apaga en tu ojo e igual que un tropiezo  la sal,…

Esta casa Me gusta esta casa. Los empedrados desde los que desemboca, las orillas de cemento que me arrastran a ella. La fauna perruna, la gatuna, y hasta los bichos. Su puerta guardiana de cariño. El calorcito de adentro. Los…

Flor de cactus, poética en Peralta Las cenizas del alba se disiparon y una huilota le canta a los rizos del sol. Danzan las nubes y soplan los vientos donde confluyen pasado y presente. Piedra sobre piedra cargadas de historias…

Derribado Y se coló la nublosa nevadilla en ojos hambrientos, la garganta seca, las mieles saladas, los amantes cansados de querer no piden elogios, y simplemente, queda encerrado el dadivoso en una jaula, esfumada la bondad de los santos, habitan…