El concepto
Galardonada con el Premio Nacional de Ciencias y Artes por el duodécimo Califa de todas las Arabias, e incondicional campeona infantil de la olimpiada mundial de matemáticas avanzadas donde el mínimo ejercicio correspondía a la ecuación para describir la expansión métrica del espacio, osea la ecuación de Friedmann, Zaida Amín ya tenía treinta y dos años bien cumplidos y deseaba tener una boda enorme y elegante en un hermoso jardín de Bagdad. Solo que Adham creía que había nacido para ser un ferviente comunista, profesor de física en preparatoria y poeta árabe. Adham se ufanaba de haber leído y releído el que él consideraba el mejor libro del mundo; Los Manuscritos económicos y filosóficos de Marx, y le respondía a Zaida que él no se quería casar, que este mundo era demasiado desigual para procrear hijos, y que él no tenía ninguna necesidad de hacer ningún evento frívolo y superficial para demostrarle nada a nadie, la quería, y esperaba que eso le bastara también a ella. Claro que esto no era así. Zaida en verdad deseaba una boda y estaba dispuesta a continuar esta discusión durante otros tres largos años hasta que Adham aceptara. Lo amaba y lo convencería para que se casara con ella. Por Alah que lo haría.
Ansiedad
México D.F.
22/3/2017
Cuando me platicas de sus enormes senos morenos comienza a escurrirse entre mis piernas un líquido viscoso y transparente. Te amé porque me llevaste al hotel donde tantas veces te desfogaste en su cara. Recuerdo que ese día bajo la regadera tuve que pararme en la punta de mis pies para que me penetres por atrás, ¿cómo no ser tu puta? Quiero usar la lencería que se ponga para tu cumpleaños, ojalá sea roja. Yo te voy a escribir una carta, amor mío, te espero el sábado.
El Destierro
Le sangró la nariz por la mañana. Cansado y deprimido, Carlos no podía recordar el lugar donde guardó su rosario y comenzaba a temer que su hijo lo hubiese tirado. Estaban solos ese lunes, así que Carlos prefería dejar dormir a Demetrio antes que tener que llevarlo a la escuela.