Albert Ehrenstein: Julian
Sonne, goldener Diskos des Titanen Helios!
Helios, der du, knietief watend im grauen Weltall,
Schleuderst die goldene Scheibe!
Kletterte ich nicht an des Gebets Mastbaum
Nach fernem Himmel,
Weinte ich nicht, und waren die Tränen
Dir nicht gehorsam?
Opfernd vergoß ich mein Blut,
Den trostlosen, rotschluchzenden Mohn.
Licht: betend starrt’ ich dich an.
Bis im gelben Sonnengespinst die Augen starben.
Nun entsinkt nicht silberner Punkt,
Zitterlicht keines Sternes der Nacht.
Aus zermorschtem, wipfellosem, erdarmem Stamm
Streckt mich ein Ast
Auf verfaulter, taufrierender Rinde:
Des kahlen Holzes letztes, herbstverlorenes Blatt.
Julian
¡Sol, disco dorado del titán Helios!
¡Helios, tú, que caminas sumergido hasta las rodillas por el gris universo
arrojas el disco de oro!
¿No trepé las ramas del árbol de la oración
hacia el cielo lejano?
¿No lloré y fueron las lágrimas
para ti obedientes?
Sacrificante, derrame mi sangre
la amapola sin consuelo, roja y sollozante.
Luz: orando, fijé en ti la mirada
hasta que en la madeja amarilla del sol, los ojos murieron.
Ya no surge el punto plateado
ni la luz titilante de ninguna estrella de la noche.
Del tronco putrefacto, sin copa y pobre de tierra
me extiende una rama,
sobre una corteza podrida y congelada por el rocío:
la última hoja perdida de otoño de la madera despojada.
Else Lasker-Schüler: Und suche Gott. (Meinem Paul)
Ich habe immer vor dem Rauschen meines Herzens gelegen,
Nie den Morgen gesehen,
Nie Gott gesucht.
Nun aber wandle ich um meines Kindes
Goldgedichtete Glieder
Und suche Gott.
Ich bin müde vom Schlummer,
Weiß nur vom Antlitz der Nacht.
Ich fürchte mich vor der Frühe,
Sie hat ein Gesicht
Wie die Menschen, die fragen.
Ich habe immer vor dem Rauschen meines Herzens gelegen.
Nun aber taste ich um meines Kindes
Gottgelichtete Glieder.
Y busco a Dios
Siempre he estado tendida ante el murmullo de mi corazón,
nunca he visto la mañana,
nunca he buscado a Dios.
Pero ahora deambulo alrededor de los miembros
de poesía dorada de mi hijo
y busco a Dios.
Estoy cansada del duermevela,
conozco solamente el semblante de la noche.
Temo el alba,
tiene el rostro
de las personas que preguntan.
Siempre he estado tendida ante el murmullo de mi corazón,
pero ahora ando a tientas alrededor de mi hijo,
de sus miembros iluminados por Dios.
Walter Hasenclever: Gedichte
Wenn der Tod
Die Musik verschlingt;
Werden wir uns erkennen?
Lebst Du Im Zimmer, wo Männer stehn?
Aus dem Meer steigt die Insel,
Ein Leben, das uns gegolten hat.
Vögel fliegen auf.
Weine nicht!
Mond. Gazellen rufen;
Die Öde der Täler, bedeckt von Schnee.
Sieh, ich wandle,
Ein Mensch der Liebe.
Ein Herz voll Hoffnung
Hat mich erreicht.
Wo bist Du?
Ein Stern fällt.
Dein Gesicht!
Du bist da!
Wenn Du den Becher leerst,
Wo jenseits Weiße Schwalben trinken:
Vergiß nicht die Träne,
Den Kuß, den Du träumlest,
Am Himmel der Toten.
Du bist geliebt!
Poesía
¿Cuando la muerte
devore la música,
nos reconoceremos?
¿Vives
en la habitación donde los hombres están de pie?
Del mar surge la isla,
una vida que ha sido para nosotros.
Las aves alzan el vuelo.
¡No llores!
Luna.
Las gacelas braman;
la desolación de los valles cubierta de nieve.
Mira, camino,
un hombre de amor.
Un corazón lleno de esperanza
me ha alcanzado.
¿Dónde estás?
Una estrella cae.
¡Tu rostro!
¡Estás aquí!
Cuando vacíes la copa,
donde al otro lado
las golondrinas blancas beben,
no olvides la lágrima,
el beso que soñaste
en el cielo de los muertos.
¡Eres amado!
Texto fuente: Pinthus, Kurt (ed), 1920, Menschheitsdämmerung. Symphonie jüngster Dichtung, Rowohlt Verlag
Semblanza:
Marcos Iván Ramos Espejel. Mtr. en Filosofía (UAM) y Lic. en Psicología (IPN). Publicación en Antología Hispanoamericana (1970-2000), revista Liberoamérica 2019; traducción de tres poemas de René Char, revista Monolito2019; Poema “Tu poesía” no, revista Nocturnario 2019; Poema “Un último cocodrilo”, revista Alerta Sociológica 2019, UAM; Cuento “Una cuestión de comunicación”, 3° lugar, publicación UAM y la Ventana de Arte Incluyente 2019; “Un rottweiler sobre la arena”, revista Perro negro de la calle; “El cráter Gernsback”, revista Teoría Ómicron. Poema “Landscape come to life”, revista Phantasma; Cuento “¿Por qué no comen los perros? (cuadro hopperiano no.3)”, Monociclo, revista literaria; Microrrelato “El infrarrealista”, Editorial Letras Rebeldes 2024.