Presencia I
Por un momento
Mi casa se ha quedado sola.
Sus ojos
Como radas de luz iridiscente
Se lamentan del musgo y el invierno.
Su oído como el ámbito del polvo
Escucha a los insectos henchirse de su savia.
Su tacto omnipresente en el silencio
Sondea los cristales de fotos y alacenas.
Mi casa
Da un respiro en nuestra ausencia.
Levanta las cortinas
Y observa el clamor de las copas de los arboles
Obsecuentes al viento y a la lluvia.
Cuenta los intervalos de sombras
Que la surcan
Esperando se trate de alguno de nosotros.
Mi casa en sus cimientos
Resguarda la ceniza de la espera
Para murmurarnos por la noche sus secretos
Cuando todos hallamos regresado.
Luz en la cortina
La tarde es un perro al otro lado del cristal
Con un charco de luz en el hocico.
Con su cálida lengua
Viene a lamer la herida en mi ventana
Viene a impregnar su vaho sobre el vidrio
Su cansino bostezo en mi reflejo.
Una luz estancada en la persiana
Revela el polvo
Guía a los sabuesos
Allí donde se oculta la memoria.
Como indistinta sombra
La tarde se agiganta.
Y el recuerdo exhumado por los canes
Se lía en sus finas hebras
Como una telaraña.
Como un musgo de culpas
Y dulces florescencias
De tardes olvidadas.
La tarde cuyo único movimiento
No nos permite nada
Con su único reflejo
Nos manda sus sabuesos
Para desenterrar nuestros recuerdos
Y sumirnos en la nada.
Semblanza:
Walter Francisco Aquino Menéndez (El Salvador). Estudiante de Ciencias Jurídicas en la Universidad Nacional de El Salvador. En cuanto a mi biografía. Mis cuentos se han publicado en las revistas, Ariadna rc, de España; Ciudad Absenta, de México y Cinco Centros, también de México y recientemente un poema de mi autoría seleccionado para Antología latinoamericana de poesía de la Editorial Casa Verde, México.