Poemas de Esther Galindo

Del libro Ártico (Mantis Editores)

 

 

TE ESCRIBO DESDE LA COCINA

donde comíamos y platicábamos

de mi amargura, del océano

que tienes entre los ojos.

 

Dormías por partes y yo fumaba

tratando de descifrar en tu rostro

los lenguajes de la bondad.

 

Me regresaste al mundo

donde no me cabe la vida

sin el resuello de cada noche.

 

 

 

EL CUERPO QUE NOS HABITA:

sus caídas y ramificaciones

detienen al sol matinal con su sombra

y la dirigen hacia espejos de agua.

Sin importar qué tan grumosa

y llena de esquirlas

la cubrí con flores artificiales

le ofrendé mis huesos.

 

Aunque me escupa y se regocije

no voy a nombrarte en vano.

 

 

 

ES EL SABOR BLANCO de la muerte

lo que entra inundando la puerta.

El otro origen no serán los hijos

decide el cuerpo

abandona la luz en octubre

y a medias

se desliza de la cama:

los pies siguen su ritual

de atestar la carne con orígenes

y luz vuelta polvo.

No saben las manos si abrir

el pecho y sacar la infancia

que sigue adolorida.

No fue “madre” lo que nació

de mi boca sin dientes

palabra enterrada en la maleza del útero

hacia donde mi genética y sus dobles filos

arrastraron el agua

de mis primeras reencarnaciones.

 

 

 

Semblanza:

Esther Galindo nació el 3 de marzo de 1984 en Durango, Dgo. Autora de Una llaga entre los muros (Torre de Babel ediciones, 2011), ha participado en diferentes encuentros de escritores en Chihuahua, Durango y Tijuana.