Poema de Víctor González Astudillo

No parlante

 

Disfruto de los secretos en voz alta

Del grito sin boca, sonidos maltrechos

Parlantes mudos, la prisión del símbolo

De la lengua sin seña ni gesto

Y así, en la ausencia del oído

Recuesto mi cabeza en ruinas callejeras

En determinados sitios del suelo

Tumbas de animales moribundos

Poemas secretos, ocultos bajo las manchas

De pisadas de perros sin rumbo

En este lugar pienso en tiempos eternos

Tuercas desprendidas del reloj

Y sonrío y luego duermo.

 

Antes disfrutaba del silencio a gritos

Como quien disfruta del rubor de mejillas

De niña sobrecogida por el invierno

Como quien disfruta de ciertos sucesos

Misteriosos, secretos, escondidos

De gestos por debajo de la carne

Desvelados por el paso de un huracán

Demonio de gente que cree ser

Como metales pesados

Y ahora el silencio solo trae malestar

De sordo quien imagina el imposible sonido

Y enciendo y apago artefactos que no hablan

Pero que logran emular el ruido del bruxismo

Y evito a toda costa la ausencia del oído

Huyo de él, desesperado, como quien corre

De olas asesinas, de rabia marina

Y los peces me persiguen

Y yo hablo en lengua de tritones.

 

 

Semblanza:

Víctor González Astudillo, Chile, Santiago, 1996 (21 años). Finalista XIV premio internacional Gonzalo Rojas Pizarro en categoría relato con el cuento Primeras letras y escrituras. Tercer lugar Concurso de Microrelatos Universidad de La Frontera 2016 con el cuento Canicas. Ha sido publicado en las revistas Kaleido, Espora, Nuevo Milenio y el Fanzine Geogra Tabvla Aphica Regni Chili, como miembro del taller Operaciones Narrativas impartido por el escritor chileno Bruno Lloret.