No parlante
Disfruto de los secretos en voz alta
Del grito sin boca, sonidos maltrechos
Parlantes mudos, la prisión del símbolo
De la lengua sin seña ni gesto
Y así, en la ausencia del oído
Recuesto mi cabeza en ruinas callejeras
En determinados sitios del suelo
Tumbas de animales moribundos
Poemas secretos, ocultos bajo las manchas
De pisadas de perros sin rumbo
En este lugar pienso en tiempos eternos
Tuercas desprendidas del reloj
Y sonrío y luego duermo.
Antes disfrutaba del silencio a gritos
Como quien disfruta del rubor de mejillas
De niña sobrecogida por el invierno
Como quien disfruta de ciertos sucesos
Misteriosos, secretos, escondidos
De gestos por debajo de la carne
Desvelados por el paso de un huracán
Demonio de gente que cree ser
Como metales pesados
Y ahora el silencio solo trae malestar
De sordo quien imagina el imposible sonido
Y enciendo y apago artefactos que no hablan
Pero que logran emular el ruido del bruxismo
Y evito a toda costa la ausencia del oído
Huyo de él, desesperado, como quien corre
De olas asesinas, de rabia marina
Y los peces me persiguen
Y yo hablo en lengua de tritones.
Semblanza:
Víctor González Astudillo, Chile, Santiago, 1996 (21 años). Finalista XIV premio internacional Gonzalo Rojas Pizarro en categoría relato con el cuento Primeras letras y escrituras. Tercer lugar Concurso de Microrelatos Universidad de La Frontera 2016 con el cuento Canicas. Ha sido publicado en las revistas Kaleido, Espora, Nuevo Milenio y el Fanzine Geogra Tabvla Aphica Regni Chili, como miembro del taller Operaciones Narrativas impartido por el escritor chileno Bruno Lloret.