Mujer
Hembra de suelo,
proscrita silueta en lechos efímeros;
por qué las mariposas.
Para qué simulas
cuerpo dormido en carne verde,
para qué los geranios,
las ventanas para qué.
Por qué la palabra deseo
extendida en la sombra
y la boca negada al encuentro.
Es primavera la entraña del jardín.
La noche no es fiesta sin tu pubis
o el gemido de los muros.
Llevas dentro polen.
Tu boca es permanente.
Pero las mariposas se van,
dejan su beso al alba,
su alma bendice la flor;
el ocaso las enciende y extiende el cielo,
sólo para jugar al deseo.
Semblanza:
Miguel Cortés Gutiérrez, Atenas, Costa Rica, 1973. Formación en Historia, UCR; Pedagogía, UNED. Con más de veinticinco años en la poesía. Tres libros publicados: Los cantos esperados, España, 2007; Cantos boreales, España, 2014; Algunas ideas para guardar silencio, México, 2015. Padre verdadero. Ambientalista convencido. En 2015 se le concede el Premio Internacional Simón Bolívar para la Cultura, los Artes, la Literatura, las Ciencias, las Innovaciones, en la Categoría A la Consolidación de una trayectoria. Isla Margarita, Venezuela.
