Poema de Leticia Luna

Sin pájaros ni madreselvas

 

A Benjamín Anaya

 

Pasaré por tu calle como por tu cuerpo

con un poema desnudo de toda enciclopedia.

 

Quién soy yo para nombrar tu claridad

en un amanecer que se sonroja

boca de mirlo con sed y sin abrigo.

 

Para ti no tengo coartada, ni gloria, ni infinito

no tengo amaneceres, ni pájaros, ni madreselvas

no tengo avestruces en cuyo vientre acurrucarte.

 

Para ti no hay espinas, ni aduanas, ni soldados

no hay sombras, ni famas, ni gorriones

no hay púas, ni codornices en el estómago del día

para ti sólo tengo mi vocación de gaviota triste

mi vuelo

y voluntad de arena.