Con el invierno llegan las vacaciones y hay más tiempo para leer lo que nos plazca. Así que decidí ocupar este espacio para dar algunas opciones y pasar el tiempo en la cama con un libro, una buena cobija y mucho ponche.
La primera opción es un escritor argentino que se crio en España: Andrés Neuman. Es novelista, ensayista, poeta y tiene un delicioso blog llamado “Microrreplicas”. En éste aborda, de forma breve, temas actuales; desde las elecciones norteamericanas, pasando por los aforismos dichos por su abuela, hasta la excentricidad de Lady Gaga.
El primer libro que leí de Andrés Neuman fue gracias a la recomendación de una de mis más queridas amigas. Un día llegó con El viajero del siglo y me dijo; “Lee que te va a encantar.” Y sí, me gustó mucho… excepto el final. En ese momento estaba en la universidad y no entendí la decisión de la protagonista, de hecho odié un poco a Sophie.
Años después y con un diplomado sobre feminismo a cuestas volví a leer El viajero del siglo, esa vez ame a Sophie. Creo que es lo que hacen los buenos libros; cambian contigo.
En Hablar Solos (otra de sus novelas) a través de los monólogos de sus protagonistas, narra la historia de un viaje. Lito recorre la carretera con su padre moribundo (Mario) mientras que su madre (Elena) se queda en casa.
Entre muchas otras cosas, el autor plantea no sólo el sufrimiento del enfermo sino de quién lo cuida. Elena sabe que el cuerpo de su esposo está expirando y se da cuenta que como el suyo, es un cuerpo que cambia. La diferencia es que el cuerpo de Mario se transforma a pasos agigantados.
A Elena todo le habla sobre la muerte, incluso los libros. Lo único que la salva, o mejor dicho, que la adormece, es el sexo con el oncólogo de su marido. Aunque luego sienta culpa.
Quizás por eso me gusta este autor, porque en la mayoría de los textos escritos por hombres, encuentro mujeres tuertas o cojas, son unas santas o son prostitutas. Andrés crea a sus protagonistas con tonalidades grises.
Así que para estas pequeñas vacaciones, Neuman representa una buena opción. Otra opción es F. Scott Fitzgerald. Si bien este escritor es más conocido por su novela El gran Gatsby yo lo recomendaría por sus cuentos.
Uno de ellos ya fue llevado al cine, me refiero a “El curioso caso de Benjamin Button”. El cuento tiene la misma trama que la película, pero los acontecimientos en torno al hombre que va rejuveneciendo son totalmente diferentes. Otros de sus cuentos que valdrían la pena leer son: El diamante tan grande como el Ritz o El pirata de la costa.
Ya que si se quiere leer algo de poesía y andar curioseando por la red, la escritora Luna Miguel representa una gran opción. En su página www.lunamiguel.com se pueden encontrar una variedad de poemas. Los temas que toca la autora están relacionados con la muerte, el sexo o la maternidad.
Mi última recomendación son los ensayos de la científica Sharman Apt Rusell que abordan desde la vida secreta de las flores hasta mariposas que pueden llegar a obsesionarte. Con un lenguaje ligero puede explicarte porque las abejas polinizan sólo ciertas flores, Lo malo es que a veces sus libros son difíciles de encontrar y muchos de ellos aún no están traducidos al español.