Timo educativo al estilo USA

En el año 2013 salió a la luz una noticia que sacudió al sistema educativo de los E.E.U.U, dicha información hacía referencia al hallazgo de un fraude masivo en la presentación de los resultados de desempeño académico de miles estudiantes de enseñanza primaria matriculados en la ciudad de Atlanta, Georgia, situación que tuvo lugar en el año 2009.

Cabe subrayar, que en dicha trampa estuvieron involucradas más de 44 primarias estatales, 35 profesores y diversos funcionarios gubernamentales; los cuales se vieron motivados para cometer dicho engaño, debido a los suculentos incentivos económicos que otorga el gobierno federal  estadounidense a los profesores e instituciones educativas con las notas más altas. Se tiene como principal parámetro (prácticamente único) el desempeño académico de los alumnos.

En este contexto, debemos destacar el caso de Beverly Hall, ex superintendente de la zona donde se localizan las escuelas primarias afectadas y que presuntamente fue la autora intelectual de dicha trama.

Si bien la Sra. Hall se salvó de ir a la cárcel debido a que falleció de cáncer el pasado año 2014,  bastante tiempo antes de que el juez correspondiente emitiera una sentencia, dicho personaje representa muy bien a todos los involucrados en este lamentable asunto, ya que fue nombrada en el año 2009 como “superintendente del año”, distinción que le trajo importantes beneficios económicos, situación que se justifico en su momento  gracias a la increíble mejora académica que se observó en todas las escuelas de su sector.

De igual forma, es importante enfatizar que la Sra. Hall fue ampliamente elogiada por la Asociación Estadounidense de la Administración de Escuelas y por el gobierno federal, los cuales llegaron a presentarla como un ejemplo a seguir en materia educativa y como una digna representante de los “valores americanos”.

En el caso de México, es necesario tomar nota del fraude docente sucedido en la ciudad de Atlanta, ya que las reformas educativas impulsadas desde la implantación del neoliberalismo cuya última expresión la encontramos en los cambios fallidos en materia de educación instaurados por el presidente Enrique Peña Nieto, se han enfocado en impulsar una serie medidas orientadas a privilegiar la creación de un sistema de incentivos y castigos al profesorado basados sólo en el aspecto resultadista de la evaluación académica, cuestión que básicamente promueve la puesta en marcha de estafas como la antes referida.

Finalmente, es importante tener en cuenta que cuando se aplican irrestrictamente los valores del capitalismo depredador en ámbitos tan sensibles como es el de la enseñanza, los timos educativos al estilo USA son y serán la constante que confirma la norma, más nunca la excepción.