Gilles Deleuze escribió “mi herida existía antes de mí; nací para encontrarla”. Y esta cita viene a cuento a de razón de este nuevo espacio. Un medio más en el que estaré en un diálogo quincenal con ustedes los lectores.
La herida no es sino aquella lesión sangrante que no termina por darnos significado –tal vez, al cerrarse, podremos entonces sí, saber quiénes somos— y se manifiesta entre otras cosas, en esta necesidad de decir todo eso que daña y afecta no sólo nuestro interior sino el contexto social en el que nos desenvolvemos.
Y todos esos elementos externos que nos hacen ser una maraña de incertidumbres y miedos resultan agobiantes, al grado, que muchas veces preferimos engañarnos, no darnos cuenta de la profundidad de las cosas, de los problemas que nos aquejan, ya sea porque son muchos, ya sea porque no se ve la manera de resolverlos, ya sea porque nos sentimos pequeñísimos ante la voracidad de éstos que siguen avanzando junto a los días que pesan tanto.
Por esta razón, en esta columna, abordaré temas de interés social, de la realidad que vi vimos todos. Ideas parciales lanzadas al lector con la intensión de generar un diálogo a la distancia, porque la herida en mí tampoco cierra, no quiere, o más bien, no la dejo: cerrarla sería olvidarme, engañarme, alejarme no sólo de todo sino de mí mismo.
No creo que, para estos tiempos en los que vivimos en México, el soslayar los problemas que nos aquejan, sea una opción moral ni ética ni, por lo demás, práctica.
Para darnos cuenta de lo que ocurre con nosotros y lo que nos rodea –problemas, sociales, políticos y demás— y del porqué de ello, debemos propiciar la conversación de la cual surjan preguntas fundamentales.
La superficialidad de lo emocional habrá que dejarlo como acompañante de nuestras palabras, entremos a los temas con la apertura crítica con relación a todo y en ese todo, nos incluimos.
Sean, entonces, bienvenidos a este espacio.
Por otro lado, no quiero dejar de agradecer a ustedes los lectores por seguir el avance de este proyecto de revista. Sus visitas, lecturas y seguimiento en redes sociales provocaron esta nueva etapa web en la que hemos incluido nuevas secciones: ReporArte y Posturas.
En Posturas encontrarán artículos enfocados a temas de interés social, político y cultural. Los invito a seguir diariamente a Monolito, para que puedan estar al tanto de aquello que tienen qué decir nuestros columnistas (a los cuales también agradezco su participación en este medio) sobre los temas antes mencionados.
ReporArte es una nueva sección en la que te entregaremos reportajes centrados en todo tipo de expresiones artísticas y literarias.
Sin más, les doy la bienvenida a esta sección de columnas, a esta nueva etapa de Revista Monolito.