Poemas “6” y “7” de Xánath Caraza

6.

Todo es mar

sin orilla 

en este día que comienza.

La luz dorada 

del amanecer rompe

la densa niebla

y la oscuridad.

Las constelaciones

se desvanecen y 

una lluvia ambarina

penetra la noche.

Las manos escriben.

Derrotan los miedos

nocturnos 

al expulsarlos

al escribirlos en 

la nacarada superficie.

Las manos los entierran

en el subsuelo

creado por la tinta

y el papel. 

Se minimizan al

despuntar del día.

Temores antiguos,

lumbre ancestral.

7.

La luz crepuscular

se apodera del día.

Hécate en los nocturnos pensamientos.

La incertidumbre abraza,

subjuntivo de azogue.

Mitológicos miedos.

Se hunden en un mar  

de aguas plúmbeas,

entrelazados con 

el hambre de vivir.