Minificción de Mónica RC

Contacto

Nuestro refugio era un paraguas incapaz de vencer al viento. Preocupada de que mis auriculares y su viejo teléfono se dañaran le pedí guardarlos, pero su deseo de conectar con el mundo en aquel momento apagó el mío de desconectarme de él en cualquier otro.

La lluvia se detuvo y nuestra ropa ayudó al agua a seguir cayendo al suelo, nos encontrábamos muy cerca uno del otro pero él estaba encantado por esa voz que se interponía entre nosotros. Caminando hacia la cabaña las palabras nos permitieron visualizar el cielo de aquella hermosa ciudad a la que prometimos algún día regresar; llamar a sus padres le era imposible pero el humor del viejo y famoso locutor no le permitía sacar sus risas de su mente. 

Tras notar al diálogo cesar, puso el paraguas sobre un tronco húmedo y tomó mi mano; dijo desconocer la canción al igual que yo pero bailamos por horas bajo los pinos, lentamente y aún con los auriculares puestos. Fue ahí cuando entendí su fascinación y, a la mañana siguiente, tomé la iniciativa de escuchar nuevamente la radio.