¡Escritor/a!: si te rechazan, no te preocupes. Incluso es mejor. Los rechazos te ayudan a pulir tus obras. En estos tiempos de crisis editorial, el rechazo es lo normal. No tiene nada que ver con la obra que envías. Rechazan por inercia. Por la fuerza de la costumbre. Se vende poco. No está el mercado para ir asumiendo riesgos. Si no ven en ti una marca que vende, te rechazarán. Da igual lo que les envíes. Pero sigue puliendo tus obras. Persevera. Reinvéntate.
Escribo este artículo con dos fines: consolar a los rechazados/as y darme autobombo (muy necesario cuando no tienes un gran grupo editorial empujándote hacia arriba). Y para ello voy a transcribir una pequeña parte de lo que la crítica (libre) ha dicho sobre 2222, mi última novela, obra que, naturalmente, fue rechazada por dos docenas de editoriales. Obra que nadie quería. Obra que a estas horas podría estar en mi cajón digital si la fortuna no hubiera estado de mi lado. Ah, esa suerte de estar donde hay que estar en el momento preciso.
Literal Forest: «Un autor inclasificable, con un estilo audaz y poderoso».
Ni un día sin libro: «Discurso rotundo e inconfundible. Hay pocos autores que con unas pocas líneas sea sencillo identificar, esos cuya firma se hace innecesaria porque lo que escriben les define».
Kika Sureda (Revista Zubyah): «Me he quedado fascinada con 2222».
Eduard Aguilar: «Un estilo particular que conjuga una sintaxis contundente, a veces obsesiva, y un léxico que nos retrotrae a la mejor versión de la CF, aquella que contextualiza en los detalles sólo como ancla para llevar hasta las profundidades el ansia de conocimiento del espíritu humano».
Las Inquilinas de Netherfield: «Autenticidad narrativa y personalidad única, singular. No hace falta mirar la portada para saber que es suyo: lo sabes en cuanto lees dos líneas. Frases cortas, directas a la yugular, pinchando como el aguijón de una avispa en el sitio preciso. Salvador tiene un estilo narrativo personal, propio, y eso es algo que se tiene dentro o no se tiene».
Ni un día sin libro: «Definitivamente, PL Salvador me ha vuelto a dejar con la boca abierta. Ya os conté mis impresiones con Nueve Semanas. Un libro rupturista en fondo y forma, una lectura que se coló en nuestro blog casi sin darnos cuenta y se ha convertido —por la cercanía de su propuesta con nuestra forma de entender la literatura— en uno de esos libros que aparecen en nuestras conversaciones con amigos cuando queremos descubrirles nuevas fronteras como lectores».
El Periodicum: «2222 es una historia de ciencia ficción que atrapará incluso a los menos apasionados del género».
La Nueva España: «2222 es una inquietante historia futurista que permite a PL Salvador reflexionar sobre un amargo presente».
Ni un día sin libro: «Sin duda uno de los libros del año. Un autor a seguir muy de cerca».
Nicolas Miñambres (Diario de León): «Una novela sorprendente».
Luis Leante: «Frases que son como petardos literarios. Cada frase, aun breve, está cargada de contenido».
Tino Pertierra: «2222 es ciencia ficción y también rabiosa actualidad».
Las Inquilinas de Netherfield: «Da igual que os gusten o no las distopías, da igual que os guste o no la ciencia ficción, da igual que os gusten o no las novelas cortas. Cuando se presenta un autor que tiene tanto que contar, que sabe cómo contarlo sin parecerse a nadie más y además lo cuenta así de bien, hay que leerlo».
José Vicente Peiró: «PL Salvador va al grano, con diálogos sintetizados y punzantes: ¿para qué contar una historia en 600 páginas si tiene bastante con 102? Sorpresas y giros argumentales muy atractivos, incluso el inicio de cada una de las cinco partes del libro. Estilo propio. Muy propio, reconocible y personal».
Babelio: «Una historia sin fisuras, rabiosamente actual, en apenas cien páginas. El estilo del autor es una de sus principales fortalezas: posee autenticidad narrativa y una personalidad única y singular que se transmite a la historia».